Los jóvenes y no tan jóvenes pasan gran parte de su vida diaria navegando en Internet, buscando amistades, eventos y/u ofertas donde poder ahorrar dinero con la compra de productos informáticos, juegos, etc.
Esta práctica ha ido evolucionando, siendo que ya empiezan a comprar lentillas por Internet. Algo totalmente desaconsejable.
Las lentes de contacto son un producto sanitario que solo se pueden vender en ciertos establecimientos especializados.
El uso de estas lentes requiere un previo estudio de los ojos antes de usarlas, el diámetro y radio de la córnea, la calidad de la lágrima y evidentemente el defecto refractivo. Sabiendo estos datos por parte de un óptico-optometrista se procede a las pruebas de las lentillas que él/ella consideren apropiadas por los parámetros y el material de las lentes de contacto.
Pasado el tiempo de adaptación y siendo todo favorable esta persona es apta para el uso de lentillas, aun así requiere un seguimiento para comprobar que todo sigue bien, que no hay falta de oxigenación en córnea, incluyendo que no varía la graduación ya que puede cambiar en poco tiempo, si debe reemplazar las lentillas o recomendarle un producto auxiliar, tipo lágrima artificial, que le pueda ayudar o prevenir de lesiones.
El uso de lentes de contacto sin la supervisión de un óptico-optometrista puede provocar conjuntivitis, hipoxia (falta de oxígeno que provoca la muerte de células cornéales) o queratitis por acanthamoeba o incluso úlceras corneales.
Si quieres usar lentillas o ya eres usuario, pásate por cualquiera de nuestros centros y te haremos una adaptación personalizada y/o te aclararemos cualquier duda que tengas referente a este tema.